¿Te has tenido que duchar alguna
vez al aire libre a menos 8ºC.? Ahora mismo decenas de miles de personas en
Grecia y Serbia se ven obligadas a ello, desafiando el invierno más frío de los
últimos 4 años en campamentos improvisados (en tiendas y en almacenes
abandonados) sin calefacción. No tienen ropa adecuada y algunos van en
chanclas. Son los olvidados. Y están atrapados.
Hace poco más de un año, España
se comprometió a acoger a algunos de los refugiados asentados en Grecia. A día
de hoy, solo hemos acogido a unas pocas de las 1590 personas que se acordó y,
como consecuencia, la mayoría de estas personas se encuentran a la intemperie,
en este frío gélido. Independientemente de si estás a favor o no de dejar
entrar refugiados a Europa, una cosa está clara: no podemos dejar que otros
seres humanos que se encuentran en Europa mueran de frío.
Las instituciones europeas están
llevando a cabo reuniones de emergencia sobre cómo ofrecer ayuda urgente. Pero
a menos que dejemos clara nuestra indignación, nuestros dirigentes no moverán
ficha.
La comunidad de Movemos Europa
tiene el poder de actuar en ambos frentes: pidiendo una solución sostenible
ante esta emergencia humanitaria y recaudando fondos para las organizaciones
que se encargan de la supervivencia de los refugiados en el terreno.